La técnica de Bass fue pionera en su época: constituye el primer ejemplo de procedimiento empleado para remover, de manera eficaz, la placa bacteriana en el surco gingival. Es decir, en el espacio presente entre la encía y las piezas dentales.
Consiste en la realización de pequeños movimientos de barrido en sentido horizontal entre la línea de la encía y cada uno de los dientes, y su uso está especialmente recomendado en aquellas personas que sufren la incidencia de enfermedades periodontales.
Es importante que, a la hora de iniciar esta técnica de cepillado, no efectuemos una presión excesiva con el cepillo dental. De esta manera, evitaremos la irritación y sangrado de nuestras encías y, a la vez, el daño del esmalte dental -abrasión dental-.
PROCEDIMIENTO
- Toma el cepillo y colócalo de manera horizontal con respecto a la línea de la encía, formando un ángulo de 45 grados.
- Realiza pequeños movimientos de manera horizontal, siempre de encía a diente, incidiendo en el surco gingival.
- Una vez que has realizado la limpieza de todas las caras vestibulares -visibles- de los dientes, continúa con la limpieza de la cara interna de los mismos. Para ello, coloca el cepillo de igual manera, formando un ángulo de 45 grados, y repite esta secuencia de movimientos por la cara interior de las piezas dentales.
- Incide en la limpieza de cada diente durante un tiempo estimado en 10 segundos.
- En caso de que el cepillado realice un ruido excesivo, estarás ejerciendo una presión superior a la recomendada.
- Se realiza un barrido de encía hacia la parte oclusal.
- Modificada: cuando existe problema de inflamación gingival.